Nueva Aventura en el Viejo Continente: Irlanda

“Estas triste?”, “Estas emocionado?”, “Sientes alguna emocion?” Estas fueron algunas de las preguntas que mi familia y amigos me hicieron en repetidas ocasiones durante las semanas previas al inicio de este viaje por Europa. Me decian que no mostraba ninguna emocion, ni siquiera aparentaba estar contento, nervioso, ansioso, o cualquier cosa. Tenian razon, hasta cierto punto; siempre he tenido nervios de viajar, pero aun no sentia la emocion de la aventura que se aproximaba, ni siquiera al empacar, planear, y decir adios.

Lo que sucedia es que no me habia dado cuenta por completo de en que me habia metido. Sin embargo, la mañana del 11 de Abril, mientras esperaba para abordar el avion en San Diego, California, recibi el siguiente correo electronico de parte de Matin, un Irlandes que me esperaba cuando atterrizara en Cork, Irlanda.

“Cuando aterrices en Cork, escribe Motofeirme en Google maps, WiFi gratis en el aeropuerto.

Toma el autobus hacia Kinsale, y bajate en Belgooly. Es la ultima parada antes de Kinsale.

El bar Huntsman de ahi tiene buena comida y WiFi. Dale mi numero a la muchacha, 8688946635.

Puedo pasar por ti ahi.”

Despues de leer este correo electronico, tuve un vistazo de lo que ocurria en aquel preciso momento. Me emocione de inmediato, la aventura estaba en curso!

Despues de hacer escala en Detroit, otra en Amsterdam, y unas 20 horas, finalmente llegue al aerropuerto de Cork, Irlanda. Immigracion estampo mi pasaporte, y mi primer pensamiento al salir del aeropuerto fue: “Rayos, pero que frio hace!”, y camine de vuelta al interior del aeropuerto, tome una bebida caliente y espere el autobus para seguir las instrucciones de Martin.

Martin me encontro en el bar Huntsman y de ahi nos condujo a su granja, una propiedad muy grande, 10 acres creo que dijo, con una par de graneros inmensos donde almacena todo tipo de maquinas de granja, tractores, y unas cuantas motocicletas, entre ellas, mi Honda Transalp que consegui hace 6 meses y ha estado guardando.

En los proximos dias, maneje la moto por la zona de campo de Cork. Todas las carreteras son de curvas, angostas, y atraviesan loma tras loma de praderas verdes. Las carreteras son pequeñas, tanto que me imaginaba como era posible que dos autos pasen al mismo tiempo, apenas caben. Tambien debia recordar manejar del lado izquierdo de la carretera, lo que me confundio al principio.

Habia estado exhausto y con hambre estos dias, pero conducir la motocicleta por estos campos era relajante y placentero. Confio en que muchos motociclistas estaran de acuerdo que, cuando uno esta en la motocicleta, especialmente en un paisaje como el de Irlanda, todo lo que paso antes de encender el motor, y todo lo que sucedera despues de acabar ese recorrido, deja de importar, no tiene peso.

Una de las noches, Martin me llevo a los bares del centro de Kinsale. Un pintorezco pueblo cerca de la granja. Martin menciono que existe un reto que consiste en beber una cerveza en cada uno de los mas de 30 bares de Kinsale; no pude ni terminar la segunda cerveza! Describio el area al decir “Esta es la zona Gaslamp de Kinsale”. Matin conoce San Diego, donde la zona Gaslamp del centro es donde se acumulan bares y clubes nocturnos. Bebimos unas cuantas KPA’s (Kinsale Pale Ale) en el bar El Tap. No habia mas de 10 o 15 personas dentro del lugar. Viniendo de San Diego, me resulto dificil creer que 10 o 15 personas mantienen este bar abierto, pero la poblacion de Kinsale es una mera fraccion de aquella de San Diego.

El bajo numero de personas en este bar era un plus para mi. Era un lugar pequeño, con alumbrado tenue, y una atmosfera tranquila. Estaba pasando un buen rato compartiendo historias con Martin. La bartender, no tanto, se veia abrumada, y se disculpo al decir:”Estoy cansada y embarazada”, la cual pense que era una excusa genial, o mejor dicho, una “grandiosa” excusa, como dicen los Irlandeses.

Mientras trabajaba en la mootocicleta, escuche a Martin hablar por telefono con un posible viajero, Martin describio las instalaciones de Motofeirme como: “Es un poco mejor que dormir en una casa de acampar”. Descripcion que pienso es justa, o quiza debatible para algunos. Martin nunca prometio un hotel de 5 estrellas. Ofrecio un cuarto junto al granero con necesidades basicas. Dormi en mi saco para dormir en uno de los colchones y no tuve queja alguna. Creo que muchos motoaventureros tampoco tendrian problema.

La ruta original que habia contemplado para esta aventura de 6 meses por Europa consistia en pasar los paises del norte en mi trayecto hacia Rusia, y los paises del sur en mi regreso a Irlanda. Si pensaba que hacia frio en Cork, aunque la muchacha del Huntsman se burlo de mi cuando le dije que tenia frio, definitivamente haria mas frio en los paises del norte. Por esta razon, Martin sugirio dirigime a los paises del sur primero. Sin objecion. Ahora estoy a bordo del Pont Avant, de Brittany Ferries, que nos llevara a mi moto y a mi a Roscoff, Francia.

Antes desalir de casa, me preocupaba mas el tema de viajar solo. Me tomara algo de tiempo acostumbrarme a ello. Ciertamente hay momentos que me gustaria compartirlos con compañia, pero no ha estado nada mal, almenos estos primeros dias. Es similar a tener que despertarse temprano por las mañanas; prefiero seguir dormido, e invento cualquier excusa para seguir en cama, pero simplemente necesito levantarme, sin pensarlo y, una vez arriba, me alegro de haberlo hecho.

One Reply to “Nueva Aventura en el Viejo Continente: Irlanda”

  1. Al leer Este Dario de tu viaje se sienre k si estas emocionado y contento, te felicito mijo sigue adelante no olvidando que te queremos mucho y que te esperamos por aka, dios te cuide y te guie por donde kiera k tus deseos de viajar te lleven………hasta la proxima historia de tu vida

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